Prensa IVIC/ Edith García.- El Centro de Física cuenta con dos salas de seminarios que ahora llevan los nombres de Claudio Mendoza y Máximo García Sucre, dos investigadores que hicieron de la Física y del IVIC su pasión. Visionarios y con gran sentido de pertenencia.
Aún cuando los espacios ya existían, se les quiso rendir un justo y merecido reconocimiento a estos dos investigadores que desempeñaron un importante papel en el Centro de Física y que dejaron un legado para las siguientes generaciones.
La actividad contó con la participación del subdirector del IVIC, doctor David Coll, el jefe del Centro de Física, doctor Eloy Sira, el doctor Ismardo Bonalde, investigador y jefe del Laboratorio de Temperaturas Bajas, así como trabajadores del centro.
Señaló Sira que esta iniciativa surge para reconocer dos labores muy particulares de dos investigadores del Centro de Física con un impacto interesante en la gestión y en la gerencia, además de sus trabajos como científicos y el entusiasmo de ambos por la defensa del IVIC.
“Las nuevas generaciones deben pensar en defender la institucionalidad y determinación como García Sucre lo hizo hasta los últimos momentos de vida”.
Por su parte, el doctor Bonalde señaló que el doctor Claudio Mendoza más allá de ser un investigador amante de lo que hacía, fue un académico a carta cabal que dejó grandes enseñanzas entre sus estudiantes, a los que inspiraba y animaba.
“Esta sala lleva su nombre porque fue un extraordinario científico y como pocos dejó el nombre de Venezuela en lo más alto de la comunidad científica, por su inquebrantable promoción y divulgación de la ciencia y su atípica pero muy fructífera relación con las artes y las ciencias sociales”.
